Lecciones tácticas, estratégicas y operacionales de la caída de Avdiivka en manos de las fuerzas rusas.
El 17 de febrero de 2024, una semana antes de cumplirse dos años de la sangrienta invasión rusa a Ucrania, y tras duros combates prolongados durante varios meses, la ciudad de Avdiivka antiguo bastión defensivo de Ucrania, cayó en manos de las fuerzas de ocupación.
La situación táctica de las unidades de maniobra que defendían la estratégica posición se tornó insostenible, frente a la superioridad de fuego y maniobra del ejército ruso y el persistente apoyo de artillería, misiles tierra-tierra, fuego de flanco de caballería y asedio con fuego aerotáctico de gran calibre.
El riesgo de ser rodeados y capturados era evidente. Por ello, el alto mando militar ucraniano encabezado por el general Oleksandr Syrsky, ordenó efectuar un acelerado repliegue táctico, y pasar a la defensa en líneas aparentemente más favorables, que por lo improvisado y abortado del asunto condujo a más bajas entre muertos, heridos, capturados como prisioneros de guerra y quizás algunos desertores. Los relatos de algunos soldados ucranianos sobrevivientes al infernal asedio ruso en Avdiivka son impactantes al describir el desorden y la desesperación, padecidos.
Avdiivka fue una posición que constituyó honroso bastión militar ucraniano durante la mayor parte de una década desde 2014, cuando el voraz apetito de Putin violó el derecho internacional y anexó Crimea y parte del oriente de Ucrania bajo la autocracia rusa, con la venia complaciente del resto del planeta.
La caída de Avdiivka, una ciudad que alguna vez fue el hogar de 30.000 personas asentadas en más o menos 30 millas cuadradas, es ahora es una ruina humeante, y punto clave para que las fuerzas terrestres rusas puedan lanzar nuevas ofensivas hacia el occidente, y mejorar las rutas y puntos de abastecimiento para el flujo logístico tan esencial en una guerra prolongada de desgaste sobre posiciones casi fijas, como es el caso de este conflicto.
Por otra parte, es el primer logro importante de orden estratégico, que han logrado las fuerzas rusas desde mayo de 2023. Luego de rechazar una contraofensiva ucraniana en el verano y el otoño del año anterior, durante lo transcurrido de 2024, las fuerzas rusas han dinamizado el ímpetu del ataque a lo largo de casi todo el frente de 600 millas de ancho, con algunas ganancias tácticas por ahora temporales en la línea Kreminna, Bakhmuth, Marinka y ahora Avdiivka aprovechando las ambigüedades dentro de Estados Unidos y los miembros de la OTAN para abastecer y apoyar con más prontitud a las ya menguadas fuerzas ucranianas.
Producto de su superioridad en personal y armamento, Rusia azotó la destruida ciudad de Avdiivka con bombardeos aéreos y ataques terrestres, inclusive a costa de una asombrosa cantidad de bajas de infantería rusa.
Superadas en capacidad de maniobra, poder de fuego, posibilidad de resistir y sin suficientes armas contundentes para repeler ataques urbanos cercanos, las fuerzas ucranianas que defendían a Avdiivka, comenzaron el miércoles 14 de febrero, el apurado repliegue táctico de las superadas posiciones al sur de la ciudad, y desde esa fecha sostuvieron una batalla desesperada para evitar el cerco dentro de la ciudad mientras las fuerzas rusas avanzaban desde múltiples direcciones, apoyadas por incesantes tormentas de fuego combinado. No obstante, según la versión del gobierno de Ucrania, sus fuerzas derribaron tres aviones de combate rusos.
Por evidente orden de Putin, ansioso de obtener alguna victoria así sea simbólica, pues en el estancado esquema de guerra de posiciones, estas pueden regresar a poder ucraniano, las tropas del Kremlin avanzaron hacia Avdiivka, pasando por encima de los cadáveres de sus propios soldados que en la práctica superaban a los defensores en promedio de 10 a 1.
Naturalmente en la etapa final del arrasador ataque ruso, las fuerzas ucranianas perdieron también a muchos y soldados e inclusive algunos de ellos fueron tomados como prisioneros de guerra.
Esto indica, que aún si las líneas defensivas ucranianas se estabilizan en la retaguardia occidental de Avdiivka, la caída de la ciudad bajo control ruso permitirá al ejército de Moscú, mayor espacio de maniobra para mover sus tropas y equipo de manera más eficiente a medida que presiona en otras direcciones del amplio frente de casi 1000 kilómetros de longitud.
La caída de "Avdiivka es un golpe táctico de valor en el balance del poder relativo de combate de las dos fuerzas en contienda y para la valoración de objetivos tácticos y estratégicos en el teatro de operaciones oriental de Ucrania. Por su ubicación geográfica, Avdiivka es importante en el esquema defensivo ucraniano, porque protege en profundidad la ciudad de Pokrovsk, ubicada a 50 kilómetros al noroccidente, donde opera un centro logístico para el ejército de Kiev.
En consecuencia, controlar efectivamente a Avdiivka podría crear una brecha defensiva para Ucrania, pero favorable al ímpetu de ataque de Rusia. El serio problema para Putin, es que a juzgar por la información de inteligencia disponible, las fuerzas rusas carecen de grandes reservas de tropas y equipos y es poco probable que a mediano plazo avancen más al oeste de Avdiivka rápidamente y convertir el reciente éxito táctico en la gran victoria que urge Putin para llegar mas sólido a su ya segura reelección presidencial.
Los soldados contactados por teléfono el viernes, que pidieron no ser identificados dada la acción militar en curso, describieron un intento desgarrador por escapar de la ciudad. Relataron cómo pasaron corriendo junto a edificios destruidos mientras los proyectiles tronaban desde todas partes y los rusos presionaban desde varias direcciones.
En síntesis, hubo un duro revés para Ucrania en una de sus posiciones fuertes de defensa en profundidad, pero Rusia no está por ahora en capacidad de explotar ese éxito, más allá de fortificándose en Avdiivka, para dinamizar su flujo logístico y de control territorial, pero también queda expuesta a los consabidos ataques de comandos ucranianos, de artillería concentrada y de drones suicidas.
Mas de lo mismo y sin solución a la vista, para un enfrentamiento que además de crónico tiene la paz del mundo en vilo.
Teniente coronel Luis Alberto Villamarín Pulido
Autor de 40 libros de geopolítica, estrategia y defensa nacional