Lamentable que en menos de una semana en el territorio de Estados Unidos hayan ocurrido tres episodios diferentes se masacres, pero todos con la misma intencionalidad. Como dijo su anterior invitado todo apunta a demostrar que la masacre en el supermercado Walmart de El Paso Texas, se deriva del odio racial y de la tirante situación que desde hace unos meses se ha incrementado contra los inmigrantes en ese país. Esto tiene un preocupante connotación, porque pudiera presentarse el caso de que pudieran surgir grupos, personas o sectores de la población, que comiencen a ejecutar venganzas similares y las espirales de violencia se podrían multiplicar más, con la circunstancia agravante que en Estados Unidos abundan en gran cantidad las armas legales e ilegales, afirmó el coronel de la reserva activa del Ejército de Colombia, en entrevista vía Skype desde Bogotá con el periodista Rafael Romo del programa Mirador Mundial de la cadena CNN en español, el 3 de agosto de 2019.
Respecto a las diferentes preguntas del entrevistador, el coronel Villamarín agregó:
Los últimos tres ataques violentos ocurridos en Estados Unidos, que para algunos analistas son terroristas y para otros no, pero ese no es el punto medular, se han concentrado sobre lugares muy concurridos, donde eventualmente asisten muchos personas de origen hispano.
Por ejemplo, el Walmart por sus precios y volumen de productos en venta, es muy visitado por los hispanos. Si este señor es de raza blanca con los apellidos que lo identifican las autoridades, podría tratarse del funcionamiento de una cadena de personas que operan en forma clandestina o subrepticia para alimentar el odio anti inmigrante y anti hispano dentro de Estados Unidos.
El asunto de crear odios y prevenciones contra la inmigración se complica más en una sociedad como la estadounidense donde se presentan tantas sinuosidades en los comportamientos de los jóvenes, lo cual da la posibilidad de que ocurran estas y muchas cosas más, similares o peores debido a la extensa circulación de armas en ese país.
Este tema debe ser atendido de manera urgente e integral por las autoridades en todos los niveles, pues la masacre de hoy en El Paso pasará a la historia como un nefasto día luctuoso, pero lo que se requiere es la respuesta de las autoridades federales y estatales para evitar que eso vuelva a ocurrir.
A juzgar por los acontecimientos, por la periodicidad, la sistematicidad y la forma sistémica como vienen ocurriendo estos ataques contra civiles inermes en Estados Unidos podría decirse que esto se convertiría en una pandemia, que por sus connotaciones puede complicarse más adelante.
Las tragedias, los actos terroristas o sucesos de violencia masiva como este de hoy en El Paso Texas, no están en el primer listado de prioridades donde nunca han ocurrido, menos en un municipio fronterizo como este en donde a pesar del importante volumen de personas que allí residen o pasan por el lugar, esta ciudad es considerada una de las más seguras de la Unión Americana.
Al ocurrir un suceso tan lamentable, toma por sorpresa a los organismos de seguridad, a los cuerpos de socorro, a los equipos médicos. Infortunadamente, las demás ciudades fronterizas o no donde residan altos porcentajes de inmigrantes, están forzadas por las circunstancias a prever este tipo de sucesos, pues la tendencia marca a que podrían repetirse en cualquiera de ellas dentro de los 50 Estados.
Frente al reconocimiento federal de que El Paso Texas es una de las ciudades mas importantes de Estados Unidos, es importante tener en cuenta que los estándares con que determinan esas calificaciones tienen que ver con atracos, asesinatos selectivos o individuales, hurtos a la propiedad privada, casos de acceso carnal violento, lesiones personales, pero masacres por odios raciales, razones religiosas, o terrorismo islámico son hechos diferentes, que forzarían a medir con otros estándares los raseros de seguridad en Estados Unidos, pues esa es la desafortunada tendencia de los últimos días. O lo que es peor, que surjan grupos privados o personas que de manera individual efectúen retaliaciones contra quienes consideran sus agresores racistas.
La creciente tensión y la polarización entre demócratas y republicanos en torno al tema de los inmigrantes no ayuda para aclimatar la convivencia sin odios, ni racismos ni violencias. Como se ha visto en los últimos meses, al situación se ha tornado candente y compleja, a partir de los anuncios del gobierno Trump de construir el muro, las muertes de inmigrantes en centros de concentración de inmigrantes indocumentados, los insultos a hispano parlantes en sus lugares de trabajo, etc, son sucesos que al unirlos demostrarían la complejidad del problema.
La fecha para perpetrar la masacre fue calculadamente escogida por el agresor, con ocasión del regreso de los estudiantes a clases, pues Walmart es una tienda que provee a buenos precios los implementos que requieren los alumnos para ir a las aulas. Insisto en que se trata de una masacre racista, pues los gritos y voces pidiendo auxilio que se escuchan en el video, son de personas que hablan en español con acento mexicano o centroamericano.