Al término de la semana santa se desató un debate bizantino en las redes sociales de las reservas de la Fuerza Pública, tras la avivatada del general Jorge Mora Rangel autonombrándose representante del gremio ante Fico, con la subrepticia pero evidente intención de que "a la hora de los nombramientos burocráticos, el indicado soy yo, así esté desprestigiado hasta los tuétanos por la debilidad de carácter que demostré en La Habana".
Su miopía política al no entender el pésimo concepto que de él tienen las reservas, fue contestada con vehemente agresividad por "expertos en política, que según ellos son bases y verdaderos representantes de las reservas, pese a que tampoco los ha escogido nadie".
Dos sucesos relacionados con el mismo asunto que demuestran:
1. Que a quienes no invitan ni en una emisora veredal para conocer sus planteamientos o proyectos políticos, siguen en más de lo mismo, que ha llevado sucesivamente elección tras elección, al mismo resultado de derrota, frustración y vergüenza.
2. Que sin proponérselo, los políticos experimentados conocieron el cobre del general Mora y sus ácidos contradictores. Por lo tanto, estarán felices al observar que pueden seguir manipulando los ímpetus de la reserva, porque por lo visto, ninguno de los celosos contendientes por ser el vocero de quienes entre otras cosas van a votar por Fico sin necesidad de esos voceros iluminados, exteriorizan socarronamente, que no poseen la más mínima idea, acerca de cómo se construyen alianzas programáticas en la verdadera política.
3 Que lo único claro y concreto de este bochornoso y lesivo suceso para Colombia y sus reservas militares o policiales, es que existe una pugnacidad interna de egos "porque el representante de las reservas no soy yo. La razón de Mora: porque me arrodillé ante De La Calle y los bandidos en Cuba. Y, desde la otra orilla, porque ya tengo experiencia política, pues recogí firmas en una planilla y participé en algunas marrullas con algún politiquero.
4. Que para lograr algo concreto y compromisos reales con el candidato Fico, no se necesitan figurones locuaces, ni oportunistas, ni montoneras con representantes de cada gremio, ni sujetos ansiosos de que los vean en la foto con el candidato.
5 Que la desastrosa experiencia de las reservas de la Fuerza Pública, en la reciente contienda electoral para el Congreso, no ha sido comprendida por los “expertos que nos deberían representar ante Fico”, porque a todas luces siguen enfrascados en más de lo mismo.
O sea: Sin proyecto político claro, cargados de emotividades, sin ningún acceso a los medios de comunicación, sin la formación política seria en temas que son el pan diario del Congreso, sin proyectos programáticos, sin habilidades para hablar en público ante auditorios de todos los niveles académicos e intelectuales… Y la lista de “virtudes” sigue.
6. Que la argumentación para ese error, es que los actuales políticos son de esa catadura de insuficiencia, entonces “¿Por qué no puedo ser yo?”. Dicha respuesta refleja que esos “expertos en política”, por ahora tienen sobresaliente voluntad, pero mucho desenfoque frente a lo que necesita Colombia. Lo contrario es ser y hacer más de lo mismo.
Síntesis Para comprometer al candidato Fico, para que no resulte otro promesero que da palmaditas y llama sus héroes a las reservas, pero luego da la espalda, se necesita que lo encaren militares y policías pensantes seleccionados por sus logros y probadas condiciones en escenarios de alto nivel, que lleguen con agendas de negociación programática, con planes y proyectos y que tengan la habilidad negociadora de concitar acuerdos y compromisos.
Sinceramente no creemos que un pésimo negociador en La Habana, que además tuvo muchos fracasos operacionales estruendosos con las unidades bajo su mando, y que ahora busca puesticos politiqueros; o, que en su defecto, “sapientes y vehementes” expertos cargados más de bilis que de neuronas, sean los interlocutores idóneos, para comprometer a un candidato presidencial opcionado a ganar, para que ya en ejercicio del cargo, cumpla compromisos serios y bien estructurados con categoría de proyectos o programas.
Las cometas pueden volar muy alto, pero siempre necesitan estar atadas a una piola y ser orientadas por quien sabe aprovechar la dirección de los vientos.
Teniente coronel Luis Alberto Villamarín Pulido